*Con más de 70 años de antigüedad, el mercado “Teodoro A. Dehesa” es una postal de la vida cotidiana de los habitantes que cada día se ganan la vida trabajando entre locales de madera
Inés Tabal G.
Tlacotalpan, Ver. – Ventanales grandes hechos con tablas de madera adornan la facha del mercado “Teodoro A. Dehesa” ubicado frente al río de la Perla del Papaloapan.
Adentrase es navegar entre olores de la comida que se prepara en el sitio, colores que adornan sus pequeños locales y la alegría de los comerciantes tlacotalpeños que cada día se ganan la vida trabajando aquí.
Hombres que cargan costales de granos, mujeres que limpian sus locales para recibir a sus clientes, el sonido del hacha del carnicero que golpea una y otra vez la tabla de madera, son las imágenes te topas en este recorrido cotidiano.
En la entrada principal el altar de la Virgen de la Candelaria, patrona del pueblo, recibe a los lugareños y turistas para que inicien el recorrido. La oscuridad del techo se ilumina con los colores rosas y blancos de los listones que fueron colocados para adornarlo.
Este mercado abastece de los alimentos principales a la población, en sus locales se acentúa el color café y la estructura recién remodelada, da un ambiente colonial.
Un guía que lleva a un grupo de turistas extranjeros dice orgulloso que este sitio fue nombrado como el mercado más limpio del estado. Esto se puede distinguir al caminar por los pasillos donde los comerciantes procuran tener todos sus productos frescos y del día.
Con más de 70 años de antigüedad, este sitio es el punto de reunión donde conviven comerciantes, clientes y turistas que llegan a recorrer y degustar la gastronomía que se encuentra aquí.
En el mercado “Teodoro A. Dehesa” encuentras de todo, carnicerías, pollerías, verdulerías, venta de hierbas medicinales y el principal atractivo para los viajeros: los antojitos tradicionales tlacotalpeños.
Cerca de 10 locales de diferente sazón y tradición ofrecen una gran variedad de antojitos como las empanadas, picadas, panuchos y la especialidad de la región: la gorda de anís.
Este antojito típico se prepara con masa revuelta con piloncillo y anís, se sirve bañada de crema y queso fresco.
El toque de anís le da a tu paladar una explosión de sabor con cada mordisco. Como bebidas principales están el agua de horchata, Jamaica, licuados, chocomiles y café con leche.
El inm.ueble se encuentra en la entrada principal de Tlacotalpan, cerca del Centro, el otro lado de su fachada mantiene la esencia de las demás construcciones del lugar, con los arcos de sus puertas y ventanales pintados de amarillo, esos colores que distinguen y dan vida al municipio.
Son 30 minutos que invertirás de tu tiempo en el recorrido dentro de este sitio, después podrás cruzar la avenida y tomar un descanso frente al imponente río Papaloapan.
